Durante nuestro viaje a Pasto, nuestro amigo y excelente fotógrafo colombiano Pablo Villota no paraba de decirnos: “¡Tienen que ir a la reserva natural del Río Ñambí! Es un lugar extraordinario”.
A decir verdad, no habíamos planeado ir a esta parte del departamento y la región alrededor de Tumaco seguía pareciéndonos poco frecuentable… ¡pero la realidad nos demostró lo contrario! Convencidos, decidimos seguir el consejo de Pablo, ¡y sin duda fue la mejor decisión que podíamos haber tomado para este viaje por el Departamento de Nariño.
Aquí te contamos pues, la experiencia que vivimos en la reserva natural del Río Ñambí, con Mauricio, uno de los fundadores de este maravilloso proyecto de conservación que nos dejó boquiabiertos.
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Poster “Guacamaya”
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Salimos del terminal de transportes de Pasto un poco tarde. Como a veces pasa, los conductores de las busetas mienten a los viajeros anunciando una salida inminente… Lo que no te dicen es que no salen hasta que estan llenas, y eso toma su tiempo…
Llegamos a Túquerres, donde compartimos un taxi colectivo con otros viajeros para llegar a Ricaurte. Y una vez en Ricaurte debemos encontrar un taxi que nos lleve a Altaquer, nos cuesta un poco pero al final logramosconseguir uno.
Una vez en Altaquer, Mauricio nos recoge y para llevarnos a su casa, donde almorzamos antes de dirigirnos a la reserva natural del Río Ñambí.
Río Ñambí, un mundo mágico
Naturaleza y observación de aves en Río Ñambí
Mauricio es uno de los miembros fundadores de la fundación que gestiona la reserva natural. Una bella historia de un grupo de jóvenes que les contaremos al final del artículo.
Luego de una buena comida y un primer vistazo a la diversidad de aves de la región gracias a los comederos instalados cerca del Lodge, partimos hacia la reserva.
Llovisnaba, pero el camino era fácil. Poco a poco nos adentramos en el bosque más hermoso que hemos visto hasta el momento en Colombia…
El sendero de 2,5 km nos lleva por etapas hasta la cabaña que sirve de alojamiento en medio del bosque. Este bosque es mágico. Hay tanta biodiversidad aquí que no sabes dónde mirar. Los colores también son sorprendentes. Donde esperarías una simple gama de verdes, este bosque tiene algo extra. Los tonos rojos, naranjas y amarillos son llamativos y dan a este bosque primario una atmósfera única. La cantidad de musgo y líquenes es sencillamente impresionante.
¡Ante nuestros ojos el espectáculo natural es único!
Mauricio es una fuente de conocimientos, y hay que decir que este entorno ha sido su patio de recreo desde que era niño. Nos cuenta por qué esta reserva natural es tan especial y cómo científicos de todo el mundo la han convertido en su lugar favorito de estudior. Y es que este lugar es simplemente un “hotspot” entres los hotspots de biodiversidad!
Por fin llegamos a la cabaña donde dormiremos. Sencilla pero acogedora, con instalaciones sanitarias exteriores compartidas y agua fría, Aún así, las condiciones son cómodas para un lugar tan remoto y de difícil acceso.
Numerosos colibríes rodean la casa. Una plataforma de observación en el tejado te ofrece una vista de 360° del bosque, y la posibilidad de observar las diversas especies de aves presentes con la ayuda de unos binoculares.
Vida nocturna y bioluminiscencia
Reserva Natural del Río Ñambí
Después de cenar, salimos por un sendero alrededor de la casa para descubrir la vida nocturna del bosque de Río Ñambí.
Mauricio lleva todo el día hablandonos de “champiñones fluorescentes”, ¡así que la curiosidad estaba latente! Pero aún estamos muy lejos de comprender de qué se trata. Por el camino nos cruzamos con ranitas miniatura, lagartijas, falsas arañas que pertenecen más bien al reino de los cangrejos, y varias especies de coloridos saltamontes, ¡cada uno más sorprendente que el otro!
Entonces Mauricio nos pide que apaguemos nuestras linternas.
La oscuridad era total.
Nuestros ojos se van acostumbrando poco a poco a la noche.
Y a nuestro alrededor, ¡las hojas y las ramas comienzan a iluminarse!
Es un espectáculo de locos.
De regreso a la cabaña, Mauricio hacemos una fogata fuera y todos nos sentamos a su alrededor, compartiendo un viche local. Las historias cobran vida, mitos y leyendas del bosque, visiones, espíritus, cada uno comparte su experiencia y los misterios que rodean estos lugares.
Finalmente es hora de ir a descansar después de este día incríble, con la cabeza llena de imágenes de esta naturaleza que nos ha regalado un espectáculo único.
Dato curioso
Río Ñambi, el sueño loco de un grupo de estudiantes de Altaquer
Fue a principios de los años 90 cuando un grupo de jóvenes bachilleres del pueblo de Altaquer se interesaron por los temas medioambientales y pusieron en marcha iniciativas dirigidas a la población local: promover el reciclaje, proteger las especies animales y vegetales de la región, etc.
En 1991, un grupo de ornitólogos de la Universidad de Cambridge que buscaba un lugar de investigación se puso en contacto con los jóvenes de Altaquer. Tras pensarlo un poco, decidieron llevar a los científicos a un terreno que pertenecía a un tío de Mauricio y Cristian, dos de los miembros fundadores de la fundación. El grupo de jóvenes de Altaquer pasó un mes ayudando en la investigación, y entonces se descubrió el Vireo Masteri, una nueva especie de verderón.
Así que decidieron lanzar una campaña de crowdfunding, recaudaron el dinero necesario para comprar el terreno al tío de los Flores y decidieron crear una fundación para gestionar la reserva natural de forma comunitaria.
¡Así nació la reserva natural del Río Ñambí!
Esta es la primera reserva natural comunitaria de América Latina. Le pertenece a todos los habitantes de Altaquer que tienen el deber de protegerlapara y garantizar su supervivencia en el tiempo. Todos el mantenimiento y las mejoras del lugar los lleva a cabo la comunidad, gracias a los fondos privados y públicos recaudados a lo largo de los años.
Una biodiversidad excepcional
Reserva Natural del Río Ñambí
A la mañana siguiente, salimos por el sendero que rodea la cabaña y se une al río Ñambí, que atraviesa la reserva.
Una vez más, nos asombró la belleza de este bosque y la abundancia de vegetación que lo compone. Descubrimos algunas de las orquídeas más pequeñas que habíamos visto, nos encontramos cara a cara con un sublime Motmot de pico ancho y oímos un Quetzal a nuestro alrededor que desafortunadamente no pudimos ver.
Situada a unos 1.300 m de altura en el piedemonte Andino-Pacífico, la reserva natural del Río Ñambí forma parte de lo que se conoce como el Chocó biogeográfico, que se extiende desde la frontera con Panamá hasta la frontera con Ecuador y se considera uno de los ecosistemas más importantes del planeta.
Esta privilegiada situación geográfica confiere a la Reserva Natural del Río Ñambi una riqueza natural increíble. Río Ñambí es una de las reservas naturales con mayor número de especies endémicas del planeta y es una prioridad de conservación (Bird-Life 2005).
Con más de 2.800 hectáreas de bosque primario, la vegetación está clasificada como bosque tropical de piedemonte con una inmensa variedad de Rubiaceae, Araceae y Melastomataceae, que forman un dosel de 25 a 30 m de altura.
Debido influencia de la cordillera de los Andes por un lado y del océano Pacífico por el otro, esta reserva es una especie de punto de encuentro para un impresionante número de especies de aves, incluidas las migratorias.
Dato curioso
Endemismo y nuevas especies para la ciencia
Se han registrado más de 400 especies de aves, 48 de las cuales se consideran endémicas o casi endémicas. Hay 28 especies protegidas en peligro de extinción y 32 especies de colibríes, lo que la convierte en un lugar con una de las mayores concentraciones de colibríes del mundo.
Esta reserva es objeto de programas de estudio que han permitido descubrir nuevas especies para la ciencia ya sea de plantas, aves o anfibios. Entre ellas, el Vireo Masteri, o verdedrón del Chocó una nueva especie de verderón y 6 nuevas especies de plantas, incluida la Clusia niambiensis, una nueva variedad de Clusiaceae bautizada en honor de la reserva.
La magia de esta reserva es que seguramente habrá muchos más descubrimientos científicos. Por ejemplo, en junio de 2024 se descubrió en Río Ñambí el Parablechnum givalumune, una nueva especie de helecho.
Otras reservas naturales en la zona
Qué hacer en los alrededores de Río Ñambí
Al final de la mañana, iniciamos el descenso hacia la salida de la reserva del Río Ñambi para dirigirnos a otras dos reservas naturales con la ambiciosa idea de poder observar dos especies emblemáticas de la región: el Tucán Barbudo o cabezón (Semnornis ramphastinus) y la rana Diablito(Oophaga sylvatica).
Bangsias
Aquí no nos adentramos en el bosque. Nos quedamos en un sendero abierto que facilita la observación de las aves al borde del bosque. La idea de esta visita: poder observar dos especies emblemáticas: el Toucan Barbudo y la Bangsia.
Como siempre ocurre con la fauna salvaje, no hay garantías de que puedas verlos. Y sin embargo…
Después de recorrer unos cientos de metros por el sendero, hicimos un descanso y allí estaba, ¡escondido justo encima de nuestras cabezas!
Con sus increíbles colores, nos observa, se mueve de rama en rama, antes de emprender el vuelo… ¡uno de esos momentos suspendidos que sólo la naturaleza puede ofrecer!
San Francisco
Continuamos hacia San Francisco. A los pocos kilómetros, nos detenemos para recoger a un niño de la comunidad que participa en un programa local de conservación de ranas.
Mauricio hace todo un trabajo de concientización de la población local para intentar detener la caza ilegal de anfibios, y una de las formas de hacerlo es educando a los miembros más jóvenes de la comunidad. Y aquí también el turismo tiene un papel super importante, al demostrar que conservando la especie la comunidad podrá recibir los beneficios de la visita de los turistas.
Esta rana altamente venenosa es objeto de un lucrativo comercio ilegal que amenaza su existencia. Mauricio nos cuenta que los europeos y los chinos están dispuestos a pagar una fortuna por esta especie.
Aún hay mucho trabajo por hacer, aún este 2024 se incautaron varios centenares de ranas de la familia Oophaga en el aeropuerto El Dorado de Bogotá…
Dejamos el carro a la entrada de un sendero donde esperamos avistar la famosa rana Diablito.
Ese día, la búsqueda de la rana resultó complicada, y despues entendimos por que… pero Mauricio fue en su busca y ¡por fin encontró un ejemplar! Apenas abrió su mano para mostrarnos la impresionante rana de color rojo brillante, ¡se escapó en un segundo sin haber tenido tiempo de inmortalizar el momento!
Awa “Piman” La reserva de la Nutria
Esta reserva indígena fue creada con el apoyo de Mauricio, basándose en el modelo de la reserva natural del Río Ñambí.
Además de crear esta reserva natural, el pueblo indígena Awa ha puesto en marcha una iniciativa para agrupar las reservas naturales de la región. En total, ahora hay una red de 6 reservas naturales a lo largo de la ruta entre Altaquer y Tumaco, que contribuyen a proteger las riquezas naturales de la región.
En la reserva natural de La Nutria también puedes disfrutar de varios senderos ecológicos propicios para observar la fauna y flora local.
Observación de aves en Río Ñambí
Una de las mejores reservas naturales para la observación de aves
Desde hace más de 20 años, la reserva natural del Río Ñambí se ha posicionado como uno de los mejores lugares de Colombia para la observación de aves y la ornitología. Científicos de todo el mundo vienen aquí a estudiar las especies, y los ornitólogos acuden sin dudar para observar las aves endémicas que son difíciles de ver en otro lugar que no sea la región.
Pero incluso para el público en general y los amantes la naturaleza, la belleza y la vida salvaje, la reserva natural del Río Ñambí es un paraíso para los sentidos y el espectáculo es grandioso y si tienes unos binóculares, aún más.
Contacto para visitar Río Ñambí
Reserva natural cerca de Pasto
Turismo responsable
La reserva natural del Río Ñambí es gestionada por una ONG creada en 1995 por jóvenes del pueblo de Altaquercon el fin de promover la protección del medio ambiente en una zona muy afectada por el conflicto armado de Colombia. Hoy en día, la reserva se considera un ejemplo de gestión y organización, y ha servido de modelo para la creación de muchas otras reservas en la región y más ampliamente en Colombia.
Tarifas para visitar Río Ñambí
Si prefieres encontrar un alojamiento cerca, o si tienes tu propio vehículo y sólo quieres visitar la reserva natural de Río Ñambí durante un día, tambiés es posible. Aunque nosotros te recomendamos pasar al menos una noche en la reserva.
Guía local
- Tarifa de guía en formación: $40.000 COP
- Tarifa de guía especializado: $60.000 COP
Si quieres incluir el alojamiento en tu visita a Río Ñambí, Mauricio propone dos opciones :
Alojamiento cerca de la reserva
El lodge cercano a la reserva tiene comederos donde se pueden observar fácilmente muchas especies de aves.
- Precio: $125.000 COP por persona.
- Incluye: La noche y la alimentación completa (3 comidas)
Alojamiento en la reserva
Lo ideal es pasar al menos una noche dentro de la reserva para que puedas aprovecharla al máximo, como hicimos nosotros. El albergue está situado en medio de la selva primaria y tiene habitaciones dobles, familiares o dormitorios.
- Precio: $160.000 COP por persona.
- Incluye: la noche, la alimentación completa (3 comidas) et le guide
Cómo llegar a Altaquer
Las oficinas de la Reserva Natural del Río Ñambí se encuentran en el pueblo de Altaquer, a medio camino entre Pasto (155 km) y Tumaco (130 km)
Desde Pasto
Hay dos opciones para llegar a Altaquer desde Pasto:
Ruta directa
Desde el terminal de Pasto, toma un bús en dirección a Tumaco. El problema es que sólo hay unas pocas salidas al día, así que tienes que planificarlo con mucha antelación.
- Pregunta por la parada “Albergue Aves y Flores” en Altaquer
- Duración: unas 4 horas
- Tarifa: aproximadamente 40.000 COP
- Empresa: Transipiales
Ruta en 3 etapas
Primero, tomar un colectivo hasta Túquerres. Desde allí, tomar un taxi hasta Ricaurte o, mejor aún, hasta Altaquer, donde te puede recoger el personal de la reserva natural del Río Ñambí.
- Tarifa Pasto – Tuquerres: 20.000 COP por persona (la buseta sale cuando está llena)
- Duración: aproximadamente 1h30
- Tarifa Tuquerres – Ricaurte: alrededor de 25.000 COP por persona.
- Duración: aproximadamente 2 horas
Desde Tumaco
Desde Tumaco, la forma más fácil es tomar un bús en dirección de Pasto y preguntar por la parada “Aves y Flores Lodge” o en la oficina de la reserva en Altaquer.
- Pregunta por la parada “Aves y Flores Lodge” o por la parada de Altaquer y busca la oficina de Río Ñambí
- Duración: unas 3 horas
- Precio: 30.000 COP aprox
- Empresa: Transipiales