Salamina, uno de los pueblos más lindos del eje cafetero

Decidimos ir a conocer Salamina durante nuestro recorrido por los hermosos pueblos de la zona cafetera, y nos atrevemos a decir con seguridad que Salamina es uno de los pueblos más bonitos de esta región.

Nos llevamos un muy buen recuerdo de Salamina, entre otros porque como casi siempre los encuentros marcan los viajes y aquí tuvimos la suerte de conocer a Martín, todo un personaje, de esos que dejan huella.

Así que en este artículo te contaremos nuestra aventura en Salamina y mucho más, ya que encontrarás todos nuestros consejos sobre los imprescindibles de una visita a Salamina, este precioso pueblo de Caldas en la ruta entre Manizales y Medellín

La aventura para llegar a Salamina

Hermoso pueblo de la Región Café

Para empezar, llegar hasta Salamina estuvo un poco complicado… Veníamos de Salento donde tuvimos la oportunidad de visitar el sublime valle de Carbonera.

Para llegar a Salamina tomamos un taxi hasta Pereira, luego un bus a Manizales y normalmente de ahí se toma un bus o taxi hasta Salamina, solo que ese día la carretera estaba bloqueada por un derrumbe…

Como suele ocurrir en la región, cuando llueve mucho, los derrumbes ocasionan daños en las carreteras… Ese día era uno de esos días, literal la mitad de la carretera que conecta Aranzazu y Salamina se derrumbó desde la noche anterior, los obreros trabajaban para repararlo, pero por el momento el paso estaba cortado.

En el terminal nos dan una solución: tomar el bús hasta el punto del derrumbe en Aranzazu, cruzar a pie y encontrar una solución en el lugar para continuar. Nos dicen que habrá taxis o buses esperándonos al otro lado. Es un poco incierta la cosa para nosotros, pero bueno, nos decimos que somos muchos tomando los que estamos yendo hacia Salamina, así que decidimos intentar la aventura, ya veremos.

Por suerte, cuando llegamos al nivel del derrumbe, las obras acaban de terminar y nos dicen que el bus puede pasar… El problema es que todo el mundo en el bus tiene miedo: una carretera rota a la mitad + un arreglo previsorio + un bús con 30 personas dentro = todo el mundo quiere bajarse, caminar para pasar el tramo roto y que el conductor nos recoja del otro lado.

Finalmente eso es lo que vamos a hacer. Todos volvemos a subir al bus con los pies embarrados, el conductor no está muy contento, ¡pero bueno, logramos seguir hasta nuestro destino sin problemas!

¡Bienvenidos a Salamina!

Qué hacer en Salamina

Pueblo patrimonio de Colombia

¡Por fin estamos en las calles de Salamina! Tenemos una cita con Cathy, nuestra aliada local en Medellín, que también propone visitas en los pueblos de la región (Jerico, Santa Fe de Antioquia, Guatapé, Aguadas, Salamina…).

Hacía tiempo que no veíamos a Cathy, así que cuando decidimos venir a Salamina, pensamos que estaría bien vernos y descubrir el pueblo con un guía, porque además este pueblo tiene mucha historia.

Salamina tiene una historia que le ha valido un lugar en la lista de pueblos patrimonio de Colombia. Recorremos entonces las calles de Salamina para descubrir lo que hizo la reputación del pueblo en el pasado: ¡su arquitectura!

El Maestro Eliseo Tangarife

Salamina es de especial interés pues allí se puede admirar la obra maestra del gran ebanista Eliseo Tangarife, considerado el padre de la ornamentación en la región de Antioquia.

Las calles del pueblo están llenas de hermosas casas típicas de la colonización paisa que datan del siglo XIX. Se puede admirar el excepcional trabajo de madera, tanto en el interior como en el exterior. En las ventanas talldas, los balcones de madera y las bellas puertas decoradas con figuras talladas.

En las casas más antiguas de Salamina todavía se pueden encontrar reliquias de la obra del maestro Tangarife, incluidas las sublimes “puertas del comedor” como la de la casa centenaria en la que tuvimos la suerte de entrar. Una sublime casa colonial donde nos recibió la señora Consuelo Mejía, su propietaria. Esta casa es el legado de su familia desde varias generaciones atrás y ella guarda y protege con cariño este patrimonio, Además de conservar la casa intacta, tiene una colección de muebles y objetos antiguos. Entrar a esa casa es un verdadero viaje en el tiempo. Todo un privilegio.

En Salamina nacieron muchos poetas, pintores y músicos, por lo que es conocida como “la ciudad luz”. Es una ciudad que ha conocido un esplendor que ha dejado sus huellas. En la época las familias ricas viajaron mucho por Europa y trajeron muchas ideas e influencias para la ciudad, el arte y la cultura. La arquitectura es una muestra de ello y está super bien conservada.

Cultura paisa

El Caldas es un departamento especialmente conservador, y se siente en el ambiente. La Religión católica tiene un lugar importante, y algunas tradiciones olvidadas de la cultura paisa aún se conservan. Se podría decir que hoy en día el departamento de Caldas guarda un poco el alma de la cultura paisa, quizás incluso más que el departamento de Antioquia. Y Salamina es un ejemplo perfecto.

La Última Lágrima

Nos dirigimos al cementerio de Salamina, una de los puntos de interés del pueblo. Pero es el edificio de enfrente el que llama la atención. Un edificio perteneciente a la iglesia, donde viven ancianos pobres en pequeñas habitaciones que dan a la calle. En Salamina, a pesar de su apariencia de pueblo pequeño, se perciben las diferencias de clase, como en las grandes ciudades, según las calles y los barrios…

Subiendo por la calle del cementerio, nos detenemos en una curiosa tienda: “la Ultima Lagrima”. ¿Por qué este nombre y por qué detenerse aquí? Para conocer a uno de los personajes del pueblo! Don Pedro Nel, el dueño de la tienda y que guarda mil historias de Salamina.

Don Pedro Nel lleva 12 años manteniendo la lista de los difuntos del pueblo. En un pequeño cuaderno, anota con precisión el nombre del difunto y la fecha en que el cortejo fúnebre se detendrá frente a su negocio, la última parada, la “última lágrima” para el difunto antes de acompañarlo hasta su última morada en el cementerio cercano.

La verdad vale la pena tomarse algo y conversar con Don Pedro Nel un rato, es realmente un encuentro memorable.

La Casa de la cultura

Terminamos la visita en la Casa de la Cultura, una de las casas más bellas de Salamina, y otro testimonio vivo de la obra del gran Maestro Tangarife. Hoy en día es una especie de museo y casa cultural donde se brindan talleres a los niños. En la entrada nos recibe uno de los emblemas de la ciudad, el rostro de “un diablo” tallado en madera, y a continuación accedemos a un patio precioso atravesando unas puertas talladas de una finesa impresionante. El patio está enmarcado por una inmensa escalera que conduce al segundo piso donde se encuentran las salas de exposición.

En una de las salas encontramos algunas reliquias del pasado prehispánico, herramientas tradicionales, etc., pero es otra sala llena de fotografías de Salamina de todas las épocas, algunas de las cuales datan de principios del siglo XX la que nos llamó mucho la atención. Una especie de tesoro casi escondido.

Nos encantó ver la vida de la Salamina de otro siglo fluyendo en las paredes. Retazos de vida congelados en unas fotos a lo largo de las décadas que cuentan más que cualquier libro de historias.

Estas fotos son una verdadera joya, ¡esperemos que las mantengan ahí accesibles al público!

A la salida, cruzando la calle principal del pueblo, entramos en el “Café El Polo”, un café mítico de Salamina, para degustar una de las especialidades locales: los ¡huevos al vapor! En este bar, como congelado en el tiempo, utilizan la boquilla de vapor de una antigua máquina de café italiana para cocinar los huevos.

La otra especialidad de la casa es la Macana, una especie de postre/bebida muy dulce, con leche, galletas de soda, azúcar y mantequilla, todo ello calentado con el vapor de la misma cafetera y espolvoreado con canela al final. A los lugareños les encanta, nosotros seguimos siendo bastante escépticos, ustedes tendrán que probarlo y darnos su opinión…

Salamina fuera del circuito turístico

Pueblo patrimonio de colombia

Más adelante en la semana, descubriremos otras facetas de Salamina en compañía de Martín, nuestro anfitrión donde nos alojamos en las alturas de Salamina (les daremos más información sobre ese precioso lugar más adelante en el artículo).

Martin es un producto puro de la tierra paisa, un amante de su tierra natal, Salamina, y que no se vería viviendo en otro lugar por nada del mundo. Ese día Martín nos acompaño a un taller artesanal donde se trabaja con fique y lana de oveja. Para que lo sepas, se encuentra enfrente del bar “la última lágrima” del que ya te hablamos.

Allí Conocimos a Doña Ester, que llegó a Salamina siendo una niña desde su Ecuador natal para convertirse mas tarde en la Maestra y administradora principal de este taller financiado por la Sociedad de San Vicente de Paúl de Salamina. Doña Ester aprendió este oficio de su padre y desde muy niña comenzó a transmitirlo también.

Este taller/escuela se centra en la enseñanza de procesos artesanales en torno a la lana y el fique. La formación es gratuita y las puertas están abiertas a todo el mundo. pero como siempre, ya cada vez son menos los interesados en aprender estos oficios…

Sin embargo el taller continúa funcionando y se hacen alfombras, esteras, ruanas, chales, cojines y mantas

Un poco seria al principio, Doña Ester nos explica el proceso de fabricación de sus tapetes en fique y al ver nuestro interés en su trabajo, la conversación va tomando forma, recorremos todo su taller y ¡acabamos sacandole las sonrisas! Al final, compramos uno de sus tapetes que nos gustó y también para agradecerle que nos haya dedicado un poco de su tiempo.
Visitar los talleres de los artesanos es algo que definitivamente nos encanta hacer y que vale la pena.

Se acerca la hora del almuerzo, Así que Martín decide llevarnos al mercado cubierto de Salamina.

Situado en la parte “caliente” del pueblo, el mercado es el corazón popular de Salamina. Es la entrada al pueblo donde los autobuses dejan a los viajeros, donde los taxis esperan a sus clientes, y donde por la noche el barrio se ilumina con el sonido de los bares nocturnos, los trabajadores acuden a beber su paga semanal, las prostitutas hacen su trabajo, es la vida de los pueblos rurales colombianos que continúa.

Martin nos lleva a un pequeño puesto donde probablemente nunca nos habríamos atrevido a ir nosotros solos… allí almorzamos y después de una buena comida, es el cierre del mercado, los puestos cierran uno tras otro y nosotros nos dirigimos hacia una parte del pueblo de Salamina alejada del esplendor de las grandes y elegantes casas de la Salamina tangarifesca.

De camino hacia el centro del pueblo nuevamente, nos encontramos con un par de ancianos sentados frente a su puerta con sus gallos de pelea atados a la barandilla de la escalera. Esta escena da pie a una discusión sobre la persistencia de las peleas de gallos en la región. Estos ancianos sólo los crían para venderlos luego a los seguidores de esta tradición.

Como en las grandes ciudades, los “suburbios” de Salamina muestran otra cara del pueblo. Una cara más humilde y menos glamurosa, tal vez, pero que nos sigue pareciendo importante para dar un lugar, una existencia real a lo que es Colombia en toda su complejidad.

Qué ver, qué hacer en Salamina

hermoso pueblo del eje cafetero

Basílica de la Inmaculada Concepción

Construida en 1860, la basílica es el orgullo de los habitantes de Salamina, con su imponente arquitectura románica, que se dice que fue inspirada en el templo de Salomón. Hay grandes obras de talla en madera del maestro Tangarife. La campana del templo está hecha de joyas de oro y plata fundidas, que fueron donadas por los habitantes del pueblo en su momento.

La fuente de Salamina

Esta es la curiosidad de la plaza central del pueblo: una fuente que, según dicen, es una réplica de la fuente de la plaza de la Concordia de París… En efecto, la forma general de la fuente puede hacer alusión a la de la Concordia, peror lo demás los dejamos juzgar a ustedes, si han tenido la suerte de conocer esta famosa plaza parisina.

De cualquier forma es una fuente muy bonita, de diseño efectivamente francés, pero fabricada en Bremen (Alemania). La fuente llego a Salamina en 1899 tras un viaje de 7 meses.

A algunos pasos de la fuente encontramos tambien un pequeño kiosko de madera calada que también hace pensar en los kioskos de las plazas de algunas ciudades europeas…

La Casa de la Cultura

Es una casa hermosa que data del año 1900, un testimonio vivo de todo el arte de la ornamentación del maestro Tangarife. En la entrada, la famosa cara del diablo tallada en la puerta causa una extraña impresión al visitante. En la primera planta hay varias pequeñas salas de exposición donde se pueden descubrir algunos elementos del patrimonio de Salamina desde la época precolombina hasta la actualidad.

Le cementerio

Construido en 1901, el cementerio se destaca por su edificio de entrada de estilo gótico-barroco. No olvidar pasar por la tienda la última lágrima.

San Félix

San Félix es un pequeño corregimiento al lado de Salamina y realmente fue una verdadera sorpresa que no esperábamos. Es un pueblo muy pequeño, pero amamos su ambiente rural, la amabilidad de sus habitantes y su tranquilidad después de los años oscuros. Además San Félix tiene un tesoro : Un bosque de palmas de cera en el valle de la Samaria.

El valle de la Samaria

Si sigues nuestro blog, ya sabrás que el famoso Valle del Cocora no es el único lugar de Colombia donde puedes ver las palmas de cera. Se pueden encontrar en toda la región cafetera, incluso aquí, cerca de Salamina, en el Valle de la Samaria. Allí descubrimos un bonito proyecto de conservación de las palmeras de cera, llevado a cabo por los campesinos locales. Ya les hablaremos más en detalle de este proyecto en un próximo artículo!

Visitar une finca cafetera

Salamina también forma parte de la zona cafetera, por lo que también es posible visitar una finca cafetera en los alrededores del pueblo. Como nosotros ya habíamos visitado varias fincas cafeteras en este viaje antes de llegar a Salamina, no intentamos hacer esta excursión, pero debes saber que es posible. Puedes obtener más información en tu hotel o en el punto de información turística del pueblo que funciona bien.

Visitar un trapiche

Sabemos que en Salamina también es posible visitar un trapiche tradicional y descubrir el proceso de la elaboración de la panela de manera tradicional (depende del día, si el trapiche está abierto o no). La panela es un alimento muy consumido en Colombia y elaborado a partir de la caña de azúcar.
Si decide realizar una visita guiada en Salamina con nuestra aliada local, este plan forma parte de las actividades que ella propone y que siempre dejan buenos recuerdos.

Aguadas

Aguadas, es otro de los pueblos patrimonio de Colombia. Un pueblo vecino de Salamina conocido principalmente por guardar la tradición de la fabricación del sombrero Aguadeño.
A menos de 2 horas de Salamina, es muy fácil escaparse por un día para conocer este pueblo que aunque menos bien conservado que Salamina también tiene su encanto.
Además se puede aprender de la fabricación del sombrero aguadeño, visitar a las tejedoras de palma y con suerte visitar un taller donde se terminan de dar los acabados finales a los sombreros. Punto positivo también para el museo del sombrero, donde tienen una colección impresionante de todos los sombreros de las distintas regiones de Colombia!

Alto bonito, el mejor lugar para quedarse en Salamina

dónde hospedarse en Salamina

Es aquí, en las alturas de Salamina, a 15 minutos en taxi del centro del pueblo, donde nos quedamos en Salamina. Alto Bonito es el proyecto de una vida, una utopía que Martín, el propietario, construye pacientemente a mano, pieza a pieza, con las técnicas de construcción tradicionales. Una locura.

Aquí pasamos 5 días increibles en compañía de Martín que, bajo su aspecto de hipster gruñón, es un amor de persona, divertido y sensible, un gran fotógrafo y además gran cocinero.

Si quieres saber más, te invitamos a leer nuestro artículo sobre Alto Bonito en el que te contamos con detalle como es la casa y lo que propone Martín.

Sólo te adelantamos que la vista desde Alto Bonito es sencillamente IN-CRE-Í-BLE, a todas las horas del día y especialmente a primera hora de la mañana, cuando los (muchos) gallos de Martín te hacen levantar definitivamente para disfrutar del espectáculo…

Contactar a Martín

Para ponerte en contacto con Martin directamente, puedes utilizar el siguiente formulario, no te costará más y le hará saber que vienes de de nuestra parte. Si decides quedarte allí esto nos dará derecho a una pequeña comisión. Gracias por tu apoyo.

ATENCIÓN: Por el momento, Alto Bonito sólo tiene una habitación doble disponible y las reservas deben hacerse por un mínimo de 2 noches, así que te aconsejamos RESERVAR CON ANTELACIÓN